M. E. F. A. - Las fronteras del carné de conducir
(Ultima Hora, 29 de diciembre de 2003)
Una vez más, los inmigrantes de los llamados "terceros países" somos la causa de todos lo males. Primero fueron las enfermedades, luego la delincuencia, luego se nos acusó de ser los responsables del bajo nivel cultural, y así un montón de cosas más. Ahora resulta que también somos responsables de los accidentes de carretera...
Ya está bien de tanta infamia. No descarto que puedan existir casos puntuales de falsificación de carnés, el asunto es detectarlos y aplicar la ley, pero acusar a todo el colectivo de inmigrantes resulta indignante.
Soy argentina con nacionalidad española y he obtenido el carné de conducir en mi país de origen cumpliendo con la legalidad, es decir: aprobando el examen médico y el examen teórico-práctico de conducción.
Para obtener el carné de conducir español, no obstante existir un convenio de reciprocidad, las autoridades de tráfico de la provincia en que vivía en ese momento me obligaron a realizar un examen que obviamente aprobé sin necesidad de ir a una autoescuela. Es sumamente curioso lo que ocurre con un turista argentino, para conducir en Europa debe sacar en su país un carné de conducir internacional, presentando a las autoridades que lo expiden el carné de conducir local. Lo mismo ocurre con un europeo que quiera ir a Argentina, por ejemplo. Con estos carnés internacionales se reconoce el derecho a conducir prácticamente en todo el mundo y por lo tanto a alquilar coches y tomar los seguros correspondientes. Conclusión: para las autoridades locales, el turista sabe y puede conducir. Ahora bien, resulta que si ese mismo turista, con su carné internacional en regla, se transforma en residente legal, solamente por un cambio de papeles, de hoy para mañana, ya no sabe conducir. Sencillamente es absurdo.
Señores de las autoescuelas: si lo que están buscando es un filón económico con el que engordar sus cuentas bancarias, sería interesante que dirigieran la mira a esos inmigrantes europeos (también son inmigrantes, no lo olviden) que conducen por la izquierda y que más de una vez invadiendo el carril contrario han provocado graves accidentes, sencillamente porque en su país se conduce con normas de tráfico totalmente diferentes a las de la mayoría del mundo.
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